Marzo 25, una mañana calurosa. Por suerte en el aeropuerto había aire acondicionado. Mi avión salía solo en horas, pero mi hermano tenía trámites que hacer allí. Mi hermano, un chico muy dulce, el chico mas dulce que había conocido en mi vida hasta ahora, me había convencido de viajar a California, como ya estaba aburrido del aire de Bs. As., me persuadió tanto que al fin me convenció. Yo también quería cambiar un poco de aire, conocer nuevas culturas, nuevos lugares. Y allí estaba, preparada para mi primer viaje en avión, un poco nerviosa digamos, y ansiosa.Luego de horas y horas preguntándome porque yo tenía que estar ahí todo ese tiempo si podía estar tranquilamente despidiéndome de mis amigas (aunque ya me había despedido unas 6 veces de ellas), llego el momento.
- Listo todo.- Dijo mi hermano.
- ¡Al fin nene! Estuve dos horas esperándote, ¿Por qué tardaste tanto?-
- Un pequeño problema, pero ya lo solucioné.- Me dijo mientras que yo lo miraba con cara de ‘¿Qué hiciste?’.- ¿Vamos?- Me preguntó
- Vamos.- Dije yo contenta.
Ya en el avión. Mi hermano me había dejado del lado de la pequeña ventanilla de ese enorme avión. Miré por ella y me dije a mi misma: ‘¡Chau Argentina!’ y me senté mirado al frente a relajarme de ese paradisíaco viaje, sin saber que en aquel momento mi vida iba a cambiar por completo.
Luego de horas, al fin llegamos. Todo era maravilloso, hablaban muy rápido para mi gusto, y un gran problema: ¡No entendía nada de lo que decían! Claro que sabía ingles, pero ¡Hablaban muy rápido!
Llegamos a nuestro nuevo hogar. De verdad que era muy espacioso para dos personas, pero supuse que mas adelante tendríamos visitas. Elegí la 2da habitación más grande, porque Nicolás había elegido la más grande ¬¬. Acomodé mis cosas a mi gusto, y como era de mañana decidí recorrer el lugar.
- Nico, me voy a conocer el lugar.- Le dije a mi hermano mientras que el acomodaba unas cajas.
- ¿Perdón?, ¿vos no pedís permiso?- Me dijo con cara de ‘¿Disculpa?, dejando lo que estaba haciendo.
- Ay, bueno, ¿Sr. Nicolás puedo ir a conocer el lugar?- Le pregunté en tono sarcástico.
- Si, si puede señorita Jazmín. ¡Mientras que no se pierda!- Me contesto.
- Ja, ja.- Me reí en tono sarcástico y pausado mientras que salía con las llaves y el celular en la mano.
No pude dejar de notar que al lado de mi nuevo hogar, también estaban mudándose personas, una familia. Me dio curiosidad, así que con disimulo pase por delante de la casa a la que se estaban mudando. Note que en el pasto había un bonito letrero que decía ‘Familia Jonas’. Cuando leí esto me pregunte a mi misma ‘¿Será la familia Jonas, los Jonas Brothers, los que se mudaran acá?’, me emocioné y quise saber mas, pero me di cuenta de que estaba parada justo en frente de la casa de los Jonas y para no parecer chismosa seguí mi camino recordando que debía llamar a cada una de mis BFF: Camila, Evelyn, Solange y Vanesa.
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